Me perdí. Si la torpeza cotizara a la seguridad social, podría ser el jubilado más rico de España. Había oído hablar de la iglesia rupestre de Olleros de Pisuerga (Palencia) y me entró el gusanillo de conocerla. Me hice un “jartón” de kilómetros para visitarla y me perdí. Pero como dijo Franco a la muerte de Carrero Blanco, “no hay mal que por bien no venga” (No pregunten; acababa de volar por los aires el futuro del franquismo y su mejor amigo -si es que los tuvo- y eso dijo). A cambio conocí Herrera de Pisuerga, la zona natural de Las Tuerces y un eremitorio mozárabe, el de San Pelayo, perdido en el campo, sin ningún tipo de acceso civilizado y, por ende, maravilloso.
Tras mil vueltas, con la ayuda de la invocación sonora al recuerdo de quien inventó las señalizaciones de las carreteras españolas y de su pastelera mamá, llegué al pueblecito de Olleros. Todo mereció la pena; allí estaba el templo-parroquia rupestre de los santos Justo y Pastor, conjunto eremítico que no exageramos si decimos que es de los mejores de España.
El eremitismo fue un movimiento generalizado en todas las religiones, consistente en retirarse del mundanal ruido a agrestes fragosidades donde encontrar la paz espiritual y, en las religiones monoteístas, a Dios. Si nos centramos en el cristianismo, nace en oriente, en los desiertos de Siria y Egipto, llegando a España posiblemente por influencia musulmana. Lo digo porque la mayor parte de los eremitorios del norte de la península son de arquitectura mozárabe y las crónicas nos cuentan que los eremitas eran cristianos huídos de Al-Ándalus cuando las cosas se pusieron feas a causa de las provocaciones de San Eulogio y su panda de energúmenos en su afán de provocar a las autoridades de Córdoba. Hablamos de los aledaños del siglo X.
Indudablemente, si estos protomonjes buscaban desiertos donde contactar con el Altísimo, el norte peninsular era ideal. Los astures, cántabros y vascones -más o menos cristianizados, incluso tirando a menos- los encontramos refugiados detrás de sus montañas con sus reyezuelos de dudoso origen visigodo. Por su parte, los andalusíes concentraban su población en las tierras agrícolamente más ricas: del Tajo y el Ebro hacia el sur, incluído el Levante. Así que toda la cuenca del Duero era un desierto humano a la espera de ser repoblado. Precisamente serán estos eremitas, transformados posteriormente en órdenes monacales, quienes con sus monasterios formarán la punta de lanza de la Repoblación. La Reconquista será muy otra cosa y posterior.
Pues bien, en ese escenario histórico es donde encontramos el magnífico decorado de la iglesia rupestre de Olleros de Pisuerga y el eremitorio de San Pelayo. La fábrica del templo está excavada en blanda roca cretácica, con dos naves y sus respectivos ábsides, un coro, un sepulcro inacabado y una galería más antigua que hoy se utiliza de sacristía . Las cubren falsas bóvedas ligeramente apuntadas y se sostienen sobre columnas de toscos capiteles de las que no quedan más que dos que sean originales. Todo ello tiene un indudable estilo románico primitivo con influencias mozárabes, como ya dijimos. Aunque las construcción sea del siglo décimo, hay añadidos ornamentales y arquitectónicos de hasta el siglo XVII, incluído el campanario que se encuentra exento y bastante apartado de la iglesia. En el exterior encontramos tumbas antropomorfas y refugios excavados en roca para las vivencias espirituales (y es de suponer que las corporales) de los ermitaños.
Y hasta aquí he llegado. El Arte relatado termina siendo un peñazo. Debe de ser visto , vivido y sentido, así que sirvan como aperitivo algunas imágenes que he colgado en Picasa y me haría feliz que por su causa alguien se perdiere un poquito por ese maravilloso norte de Palencia a orillas del Pisuerga. Aquí está el enlace (también a través de la sección “Mis Fotos”)
5 comentarios:
¿Así qué Herrera de Pisuerga? Habrás visto la ermita. Aunque aquí en el pueblo es lo único destacable, junto a que la Estación (de autobuses. Así la llamamos) que creo que es Neomudejar. Por la zona hay mucha construción de influencia de mozarabes como en Olleros, yo todavía no he ido, aunque me han dicho que las mejores iglesias románicas son las de la zona de Cervera (Tenían que ser de Cervera quienes me lo hayan dicho, claro regionalismo o nacionalismo regional tan popular en España).
Un saludo de Samuel.
No vi la hermita pero vi tu instituto. Por cierto, espero que hayas acabado bien. El viaje a Cervera lo tengo programado para otoño que quiero ver sus bosques de mil colores.
El instituto de Herrera, así finó, está hecho una mierda. No voy a contar las venturas desventuradas que tuvimos o que tuve, pero, ahora, en el Instituto de Aguilar, no sólo por el recinto que es un increíble monasterio con tintes góticos en un monasterio románico, estoy mejor. Bueno, regular deje Inglés y Latín, así que esperando Septiembre...
Un Saludo de Samuel.
Hola no me extraña que os encante la zona, yo estoy enamorada del lugar, si necesitaís alguna sugenecia artística o gastronómica no teneís mas que poneros en contacto conmigo. Un saludo Cerverano. Merche
Hola Merche. Tengo muchas ganas de pasar unos días en Cervera para hacer algunas fotos de tan precioso lugar. ¿Podrías recomendarme algún hotel con más o menos encanto que no sea el Parador?
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